Hace un par de días mi ordenador se fue a dormir para siempre. Es la segunda vez que esto me pasa sin haber guardado antes todas las fotos y recuerdos en alguna otra parte. Claro está que tenemos la nube y discos duros para almacenar nuestras fotos pero de esta manera nunca volverás a mirarlas, seamos sinceros, cuando fue la última vez que volviste a mirar tus fotos… nunca!

Hay un par de razones por las que esto ocurre, la primera es debido a que se pierden por el camino, muchas carpetas o discos duros, CDs que ya no puedes leer, la nube, tu teléfono, redes sociales. Las fotos se esparcen tanto que encontrarlas a veces se convertiría más en un trabajo de investigación para el detective Colombo que en una oportunidad para pasar una tarde relajada que es lo que al fin y al cabo debería ser. La segunda razón es la cantidad, tenemos tantas fotos que el simple hecho de pensar en empezar a mirarlas hace que nos rindamos sin siquiera intentarlo. La fotografía digital nos ha enseñado ha disparar en ráfaga miles de fotos inútiles, ya no nos preguntamos si de verdad necesitamos esa foto ni nos tomamos el tiempo en hacer un único disparo en condiciones, simplemente atacamos al objetivo como si le disparáramos con un Kalashnikov. Esto se resume en volver de tus vacaciones con una tarjeta SD rellena con 2.500 fotos. Ahora multiplica eso por todas las veces que te vas de vacaciones y tendrás una cifra astronómica!

Y es esta una de las razones por las que la fotografía analógica encaja en el estilo de vida del trotamundos ocasional. Te llevarás una cámara de la vieja escuela contigo, pensaras en las fotos que vas a hacer antes de disparar, revelarás el carrete a un precio asequible y obtendrás tus fotos en papel a pesar de que también las puedes tener en tu ordenador si quieres. Y para terminar, meterás las fotos en una cajita y algún que otro álbum en una esquina de tu casa y las miraras de vez en cuando con tu familia, tus amigos o tu pareja.

No podrás editar estas fotos pero tampoco hace falta ya que están hechas con el propósito de ser un recuerdo y no un cartel publicitario de Marlboro. Por otro lado, todos queremos tener fotos de alta definición para subirlas a nuestras redes sociales, pues bien ahí va eso, el hecho de tener una cámara analógica no te impide tener una digital también. Yo por ejemplo tengo una colección de 15 cámaras analógicas pero también tengo una Canon réflex digital y mi teléfono siempre conmigo. Algunas ocasiones son mejores para una instantánea Polaroid y otras mejores para un ojo de pez subacuático. Es tu elección decidir que tipo de cámara encaja con que momento.

Y para dar final a este extenso prólogo diré que lo analógico formará pronto parte de nuevo de nuestras vidas de nuevo. Esta vez no vendrá acompañado bajo el sobrenombre de hipster o vintage sino que será generalizado en todos los ámbitos de la sociedad. Somos seres humanos, necesitamos sentir, tocar! Tenemos teléfonos digitales, pantallas táctiles, dispositivos inalámbricos por todas partes, nos olvidamos de como tocar algo crea una conexión física con las cosas en nuestro entorno. Esto cambiará y hará que lo digital tenga un aspecto más analógico cada día. Una rueda para el sonido en tu teléfono como solía haber en el walkman o el típico botón para encender y apagar con su característico TIC-TAC. Auguro que la mecánica y la química tienen un brillante futuro en el mundo de la fotografía digital. Y si aún no estás convencido, puedes ver como Leica se ha revalorizado por juntar estos dos mundos convirtiéndose en una de las cámaras que combina la vieja escuela con la tecnología mas moderna y que es al mismo tiempo codiciada por todos y solo al alcance de unos pocos al ser sus precios más parecidos a los de un coche de lujo que a los de una cámara convencional. Será Leica la pionera que nos muestra el futuro a través de su mirilla?

Y ahora vamos a ver que es lo que necesitas antes de adentrarte en este bosque:

CÁMARA – La cámara es importante ya que será tu herramienta, pero no te preocupes, muchas han sido fabricadas a lo largo de los últimos 100 años, créeme. La oferta es muy grande por lo que siempre podrás elegir entre muchos modelos distintos dependiendo de lo que prefieras. Miles de marcas, objetivos y tipos de cámara se venden cada día en el mundo en rastros, tiendas de segunda mano y especialmente en eBay! Recuerdo que me compré mi primera réflex en eBay por 25€, una réflex hecha para naturalistas en la Unión Soviética “ZENIT 122” es a partir de aquí cuando empezó mi adicción. Puedes encontrar sistemas ya obsoletos a precios de risa ahí fuera. Objetivos que costaban dos meses de tu salario en su día cuestan hoy un par de horas de este ya que al no funcionar con cámaras digitales dejaron de usarse, una razón más para convertirse en Robert Capa o por lo menos usar el mismo equipamiento que él a un precio más razonable. Las réflex de 35mm son las cámaras que solían usar este tipo de fotógrafos ya que hacen fotos en alta definición. Estas cámaras fueron las primeras que capturaban en la película todo lo que se veía en la lente al encuadrar un disparo. Hoy en día para conseguir una de estas cámaras digitales con formato completo necesitarías pagar más de 2000€.

Otro tipo de cámaras interesantes y divertidas son las de la compañía llamada Lomography o Lomo. Este tipo de cámaras tiene su origen en la Unión Soviética pero esta compañía ha cogido el testigo de la madre Rusia y las fabrica ahora de nuevo con resistentes materiales plásticos para que puedas descubrir con ellas sabiendo que tienes un soporte profesional actualizado. Diana, Ojo de pez u Holga, son solo algunos de los modelos que tienen disponibles a precios más que razonables. Estas cámaras están diseñadas para ser divertidas y no tienen ninguna de las complicaciones de una réflex. Solo tienen algunos ajustes que hacen que este tipo de cámaras sean ideales para “apuntar y disparar”. Estas cámaras suelen tener muchos extras que al acoplarlos pueden darte toques más artísticos o psicodélicos. 

A pesar de que las cámaras de 35mm de “apuntar y disparar” puedan ser una buena opción para iniciarse en la fotografía de película, no tengas miedo de las réflex. Como ya he dicho antes, yo mismo empecé con una y no es tan complicado como parece, leyendo un poco, tal vez un manual en internet y aprendiendo los nombres de las partes y para que sirve cada una, todo debería ir sobre ruedas. Tan solo dispara un par de carretes probando distintas funciones y ajustes para ir aprendiendo. Tras el tercer carrete verás por ti mismo como no era tan difícil como imaginabas.

DISPARAR – Ganarás mucha confianza disparando con una cámara analógica ya que te verás forzado a creer en ti mismo a la hora de hacer fotos. No verás los resultados hasta que reveles los carretes por lo que deberás ser paciente. Aunque te cueste un par de carretes hasta que consigas los resultados que esperabas, seguirá siendo un precio razonable teniendo en cuenta que eres capaz de hacer fotografías entendiendo lo que ocurre en la cámara y controlándola tú y no como la gente que compra cámaras caras y las disparan como si supieran lo que están haciendo en modo automático. Aprende las bases, sal afuera y disfruta. Juega con los carretes, haz dobles exposiciones, juega con el obturador, el diafragma. Todo depende de ti, tú marcas las reglas. Acostumbrarse a hacer ciertos juegos puede ser divertido, como por ejemplo: haz la misma foto a distintas horas del día o la misma foto a la misma hora durante un mes, utiliza la primera y última foto para hacerte un autorretrato o utiliza todo el carrete para hacer retratos… las opciones son infinitas, tan solo intenta descubrir maneras de seguir pasándolo bien para que continúes adelante con el proceso de aprendizaje sin siquiera darte cuenta.

CARRETE – El carrete o película es muy importante ya que se comporta como una especie de sensor. Cuando vayas a comprar carretes verás números ISO 100, 200, 400, 800… Estos número se refieren a la sensibilidad del carrete a la luz. Cuanto más alto sea el número, más sensible y por tanto menor el tiempo de apertura necesario. Cuanto más bajo sea el número, menor la sensibilidad del carrete y por tanto mayor podrá ser el tiempo de exposición. Un consejo sería que compraras tantos carretes como puedas de una vez, cuantos más compres más barato te saldrá. Si está cercano a la fecha de caducidad no te preocupes, te saldrá todavía más barato y lo puedes meter en el congelador de casa dentro de su tubito para que aguante ahí años. Tan solo ten en cuenta que cuando lo vayas a descongelar debes dejarlo dentro del tubo hasta que se descongele ya que si no la condensación podría llegar a la película y dañarla. A pesar de que los carretes ya lleven muchos años caducados yo te aconsejaría que los usaras ya que es posible que consigas efectos especiales o estilos psicodélicos. Antes había carretes para todo, cientos de tipos, para fotografiar iglesias o para hacer retratos. Hoy en día el marketing no se mete tanto dentro de este mercado ya algo obsoleto por lo que ahora hay menos variedad pero sigue siendo más que suficiente para agotar tu imaginación. No solo hay carretes en color o en blanco y negro, hay muchos más a los que puedes tener acceso desde internet. Te aconsejaría que pruebes tantos carretes como puedas y te sorprendas cada vez con los resultados al revelarlos, lo que me lleva al último punto.

REVELADO – Existen distintas maneras de las cuales puedes revelar tus carretes. Podrías llevar a cabo el sueño de todo “aficionado a la fotografía” y hacer tu propio cuarto oscuro. Unos cuantos líquidos, un par de químicos, una bombilla roja y ya tienes tu laboratorio, ya no hay excusa, que empiece la magia! En caso de que no te sobre el espacio en casa todavía tienes un par de opciones disponibles para revelar tus carretes. Lo puedes hacer en una tienda para que te den los negativos por un par de Euros e invertir en un escáner especial para negativos. Una vez que escanees los negativos en casa, podrás ver las fotos en el ordenador, guardar de forma digital las que te gusten e imprimir las que te encanten. La última opción y la que yo uso más frecuentemente es la de revelar el carrete por completo. El sentimiento de ir a la tienda a recoger tus fotos sabiendo que vas a abrir un paquete lleno de recuerdos y expectativas me acelera el corazón como le ocurre a un niño cuando abre un Kinder Sorpresa. Tras esto, pego las fantásticas en un álbum y vuelvo a meter las mediocres en el sobre junto a los negativos y todo esto en una caja con los demás sobres, se podría considerar esta caja como un disco duro de la vieja escuela. Un consejo que te podría dar aquí sería el de no tener prisa a la hora de gastar los carretes. La acumulación de imágenes a lo largo del tiempo es uno de los placeres de este tipo de fotografía. Unas fotos locas de una fiesta que tuviste con tus amigos o las fotos de unas vacaciones de las que te habías olvidado, todo son recuerdos que han estado esperando dentro de esa prisión negra para que llegues tú y les enseñes la luz!!